En el apacible jardín del salón de la calle Garay 1329 , del coqueto barrio de zona Güemes en la ciudad de Mar del Plata, Raúl Valenzuela, un renombrado estilista internacional con más de 45 años de experiencia, nos recibe y nos cuenta la historia de éxito que ha dejado su huella en las principales ciudades de la moda en peluquería del mundo. Hoy, celebrando el 150º de la ciudad que lo vio nacer como profesional, Valenzuela no solo celebra su trayectoria, sino que también se embarca en una nueva aventura: impartir su vasto conocimiento a las generaciones venideras a través de un curso intensivo.
Destacando la atmósfera natural del entorno, Valenzuela resalta que, más allá de las circunstancias económicas del país, en su "santuario de la belleza" se respira una constante energía positiva. "Es una maravilla este mundo de la estética. Nos lleva a soñar, a creer, a veces hasta resulta irreal. Pero bueno, forma parte de nosotros, de sentirnos bien", afirma.
"La estética no decaiga en el sentido de que es lo que parece exterior, pero interiormente nos hace muy bien vernos bien, sentirnos bien con un buen corte, un buen color, con una buena nutrición", explica Valenzuela.
Al abordar su nuevo proyecto, la academia de estilismo, Valenzuela comparte con entusiasmo: "Nuestra academia, la verdad que es un gusto hacerlo porque lo hacemos con un grupo muy limitado pero con los tiempos justos necesarios". Resalta la colaboración con profesionales como su esposa Mabel y su equipo, quienes comparten la pasión por la estética y la formación.
"Aunque los cursos no son de muchas horas, son muy a full y muy dinámicos, pero la verdad que con mucho éxito y con mucha alegría de hacerlo porque es lo que nos toca en esta etapa de la vida: transmitir lo que nuestra experiencia", asegura Valenzuela.